Lesiones Articulares
¿Quién no ha experimentado alguna lesión debido a la actividad física o simplemente por esfuerzos cotidianos? La realidad es que todos somos susceptibles de sufrir, no solo una, sino varias lesiones a lo largo de nuestra vida, algunas de mayor gravedad que otras.
Es innegable que el entorno en el que nos desenvolvemos hoy en día (estrés, malos hábitos posturales y nutricionales, ejercicio inadecuado sobre alteraciones funcionales, entre otros) no contribuye de manera positiva a reducir las posibilidades de sufrir lesiones, ya sea en el ámbito deportivo, doméstico, laboral o de ocio. El ser humano ha ido deteriorando su funcionalidad natural y biológica a medida que se ha vuelto más sedentario, alejándose considerablemente de cómo la biología originalmente dictó que debíamos movernos. Este cambio conlleva alteraciones químicas y estructurales en el organismo que aumentan el riesgo de lesiones.
Por esta razón, cada vez más buscamos maneras, ya sea a través de enfoques físicos, psicológicos o nutricionales, de proporcionar a nuestro cuerpo los recursos necesarios para protegernos de estas indeseadas adversidades.
¿Por qué suplementarse para las lesiones?
Indudablemente, el mayor porcentaje de lesiones se manifiesta en las articulaciones y tejidos circundantes, como ligamentos, cartílagos y tendones. Cualquier desequilibrio muscular generará, a su vez, una compensación disfuncional que impactará directamente en la articulación a la que se conecta, y de manera indirecta, en otras más distantes.
Cuando esto sucede, se produce no solo una congruencia articular precaria, sino también una disparidad de tensiones y presiones que ocasionan desgastes e inflamaciones en los tejidos. Todo esto conlleva episodios comúnmente conocidos de Artritis o, en casos más severos y degenerativos, de Artrosis. En estas condiciones, somos más propensos a sufrir lesiones significativas que nos aparten temporalmente, disminuyan nuestro ritmo de entrenamiento e incluso nos obliguen a detenernos.
Los suplementos naturales se basan en extractos naturales, no sintéticos, y distan considerablemente de causar los efectos perjudiciales asociados a los fármacos, como el Ibuprofeno (AINE), lamentablemente líder indiscutible de consumo en el tratamiento de lesiones hoy en día.
Por esta razón, optar por productos biológicamente naturales, que se generan y sintetizan dentro de nuestro propio organismo, resultará mucho más beneficioso y nos permitirá obtener resultados más favorables en nuestro objetivo de recuperar o prevenir lesiones, así como para nuestra salud en general.
Suplementos para las lesiones
Centrándonos directamente en la suplementación deportiva y natural, nos encontramos con una amplia variedad de productos diseñados con este propósito. Estos pueden estar combinados en una única fórmula que proporciona, en una o varias tomas, la dosis necesaria de componentes en cantidades variables, según el fabricante u objetivo. También existe la opción de adquirir cada componente por separado, permitiéndonos elegir el que mejor se adapte a nuestras necesidades o aumentar la dosis de algún componente en particular según nuestros requerimientos.
En líneas generales, ya sea en combinación o de forma individual, los componentes más conocidos y utilizados en el ámbito de la salud articular, con el propósito de prevenir, mitigar o abordar las lesiones y sus efectos adversos, son:
MSM (MetilSulfonilMetano)
El MSM (MetilSulfonilMetano) se destaca como una forma molecular de azufre altamente biodisponible, alcanzando un 85% de biodisponibilidad en comparación con otras opciones disponibles en el mercado. Esta característica lo posiciona como uno de los tratamientos más efectivos para diversas condiciones.
El azufre, esencial para el organismo, desempeña un papel crucial en procesos biológicos y su insuficiencia se ha asociado con el envejecimiento de la piel y el deterioro de los tejidos.
Cuando el organismo cuenta con cantidades óptimas de MSM, se promueve la flexibilidad de los tejidos conectivos y de la piel, lo que contribuye a una cicatrización más efectiva. Además, el MSM exhibe propiedades antiinflamatorias, lo que resulta especialmente beneficioso para personas que sufren de patologías como la Artritis. Las personas con Artritis suelen indicar muy buenas sensaciones al tomar MSM, sobretodo en mujeres. Estudios indican muy buenos resultados en dolores articulares, Artrosis, Artritis, Sindrome del Tunel Carpiano, Epicondilitis, Tendinitis, e incluso dolores de cabeza.
Estudios respaldan la capacidad del MSM para mantener el flujo celular, permitiendo la eliminación de sustancias dañinas como el ácido láctico mientras facilita la entrada de nutrientes, refuerza su posición como un componente valioso en el tratamiento de lesiones y el mantenimiento de la salud general.
Los suplementos de MSM se pueden consumir a diario. Es recomendable empezar con una ingesta de 1500 mg durante la primera semana para evitar que el organismo se desintoxique con demasiada rapidez.
Tras la primera semana, se puede aumentar la dosis a 3000 mg diarios.
Para optimizar los resultados, es aconsejable repartir la dosis a lo largo del día.
El suplemento de MSM es totalmente seguro, por lo que incluso en dosis altas no se han observado interacciones con otros medicamentos.
Glucosamina y Condroitinina
La Glucosamina y la Condroitina son compuestos fundamentales que constituyen la base química del tejido cartilaginoso, presente de diversas formas en todo el organismo. Estos compuestos desempeñan roles especializados en los cartílagos de las articulaciones, discos intervertebrales, tendones, ligamentos, cápsulas articulares, meniscos, e incluso en la fascia que envuelve cada microfibra muscular, órganos y periostio de los huesos. Los condrocitos, células responsables de la producción de Colágeno y proteoglicanos, son esenciales en la formación de estas sustancias, entre otras.
La suplementación con Glucosamina y Condroitina no solo actúa como una barrera de protección contra posibles lesiones, sino que también contribuye a la regeneración de los tejidos afectados por lesiones previas. Investigaciones han confirmado los beneficios significativos de estas sustancias en el tratamiento de lesiones, reduciendo el tiempo de recuperación. Además, cuando se combina con un régimen de ejercicios adecuados, estas sustancias pueden mejorar la función propioceptiva de la articulación, restableciendo una óptima calidad de movimiento.
Este enfoque de suplementación no solo se muestra como una medida preventiva efectiva, sino también como un apoyo valioso en el proceso de rehabilitación, respaldando la salud y la función de los tejidos cartilaginosos en todo el cuerpo.
La dosis de Glucosamina utilizada en estudios clínicos y recomendada en muchos suplementos es de alrededor de 1500 mg al día, divididos en dos o tres dosis. La de Condroitina es de 600-1000 mg al día.
En el caso de nuestro producto equivale a tomar 3 cápsulas al día.
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Colágeno
El Colágeno, producido por los condrocitos, es una proteína presente en diversos tejidos, incluyendo la piel, el pelo y las uñas, proporcionándoles flexibilidad, elasticidad y características estructurales. Estas proteínas fibrosas son esenciales para la fuerza y la integridad de los tejidos.
La falta de Colágeno puede dar lugar a problemas como rigidez, dolor articular y procesos inflamatorios como la Artritis y la Tendinitis, entre otros.
En términos de suplementación, existen dos formas predominantes de Colágeno:
- Colágeno Marino: Proviene de fuentes marinas, generalmente obtenido del pescado. Se hidroliza para obtener el peso molecular óptimo y maximizar sus propiedades beneficiosas.
- Colágeno Terrestre: Se obtiene de fuentes como bovinos, porcinos o aves y se presenta comúnmente en forma de polvo.
Al consumir Colágeno, ya sea en forma hidrolizada o no, el organismo lo descompone en sus aminoácidos más simples durante la digestión. Estos aminoácidos se absorben en el torrente sanguíneo y están disponibles para ser utilizados por las células según las necesidades del organismo.
Dada la importancia del Colágeno en el organismo, incorporar suplementos de Colágeno, ya sea marino o terrestre, se convierte en un aliado magnífico para respaldar la salud y la funcionalidad de diversos tejidos.
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Ácido Hialurónico
El Ácido Hialurónico es una sustancia natural presente en el organismo humano y forma parte de los glucosaminoglicanos, estableciendo una conexión directa con la Glucosamina y la Condroitina. Desempeña un papel esencial en el proceso homeostático articular, interviniendo en la autorregulación y mantenimiento de la composición y propiedades internas de las articulaciones y tejidos. Su contribución principal se evidencia en el líquido sinovial, donde actúa lubricando y nutriendo el cartílago.
Es importante destacar que el Ácido Hialurónico tiene la capacidad única de retener agua, proporcionando hidratación a los tejidos. Esta característica es especialmente crucial en la piel, donde contribuye a mantenerla saludable y flexible.
Numerosos estudios respaldan la efectividad del Ácido Hialurónico en el tratamiento de dolores e inflamaciones en la rodilla. Aunque muchas veces se administran mediante infiltraciones directas en la articulación, también se ha observado mejoría al consumirlo de manera oral. Es una opción viable para aquellos que buscan alternativas accesibles para abordar lesiones y mejorar la salud articular.
Se recomienda tomar el Ácido Hialurónico por vía oral en forma de sal hidrolizada, normalmente a partir de Hialuronato de Sodio.
La asimilación del Ácido Hialurónico por vía oral solo se da en aquellos productos en los que se presenta en forma hidrolizada (pre-digerida) y con alto peso molecular, puesto que la molécula del Ácido Hialurónico no se digiere y absorbe fácilmente.
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Magnesio
El Magnesio, en su forma salina, emerge como un mineral esencial para la vitalidad de todas las células. Se ha observado que desempeña un papel crucial en la formación del Colágeno, actuando prácticamente como un precursor en este proceso. Las insuficiencias de Magnesio se vinculan estrechamente con afecciones como la Artritis y la Osteoporosis, que afectan negativamente al sistema óseo.
Además, el Magnesio guarda una relación directa con el estrés, estableciendo una conexión bidireccional: el estrés puede generar deficiencia de Magnesio, y a su vez, la falta de Magnesio puede contribuir a una mayor sensibilidad al estrés. En mujeres, su importancia se acentúa en momentos de cambios hormonales, como la menstruación y el embarazo.
En el ámbito deportivo, el Magnesio está estrechamente ligado a la prevención de calambres y espasmos musculares durante o después del ejercicio, dado su papel en las células del tejido nervioso. Los calambres musculares, molestos y dolorosos, pueden manifestarse con frecuencia, resaltando aún más la importancia de este mineral en la dieta diaria.
No podemos pasar por alto la relevancia del Magnesio para contrarrestar los efectos negativos de un medio ácido en el organismo. Este entorno ácido puede tener consecuencias devastadoras para los tejidos musculares, conectivos e incluso neuronales. Múltiples factores pueden contribuir a la acidificación del organismo, pero el estrés, tanto físico como psicológico, destaca como una de las causas más significativas.
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Otros suplementos
Complejos de sales minerales
Estas fórmulas son altas en Calcio, Magnesio, Cromo y Zinc y Vitaminas del grupo B, juegan un papel esencial en las reacciones del estrés y ayudan mitigar sus efectos como el cansancio físico.
Antioxidantes
Ayudan a eliminar los radicales libres, moléculas inestables y altamente reactivas que tienen como cometido oxidar otras beneficiosas volviéndolas a su vez inestables y así provocar una reacción en cadena que sin duda provocará múltiple daño celular. Entre los mejores antioxidantes podemos encontrar el Ácido Alfa Lipóico, el Resveratrol, la Vitamina C, la Chlorella, la Astaxantina y la Coenzima Q10.
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Adaptógenos
El Ginseng, el Astrágalo, la Rhodiola y la Ashwagandha ayudan al organismo a lidiar con los efectos secundarios del estrés y reequilibrar el metabolismo.
Estos suplementos no sólo mantienen los niveles de Cortisol más bajos, sino que también ayudarán a disminuir los efectos del estrés en el organismo mediante la estimulación del sistema inmune.
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Melatonina
Aunque es sintetizada en laboratorios, es una hormona que se encuentra en forma natural en el cuerpo humano. Ésta hormona tiene como característica principal, la de regular el ritmo biológico y el ciclo del sueño/vigilia del organismo. El consumo en ocasiones de Melatonina ha demostrado combatir los efectos prolongados del Cortisol, regulación hormonal y ayudar a dormir y descansar mejor.
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En conclusión, no sólo se puede, sino que se deben buscar todas esas alternativas que nos faciliten de algún modo u otro, la mejora de nuestra salud y la recuperación de esas lesiones que intoxican nuestra calidad de vida. Y una de ellas es claramente, la vía de la suplementación.
